Un hombre había denunciado al Presidente Alberto Fernández por abuso de autoridad a partir de las restricciones impuestas por la pandemia del coronavirus.
El mismo había argumentado que es un artista que se presenta en bares, restaurantes, fiestas y eventos sociales, y que con las suspensiones de esas actividades se quedó sin trabajo.
Además, dijo ser estudiante de una carrera terciaria que debió abandonar por las restricciones a las actividades públicas.
La denuncia fue rechazada en dos instancias, pero el hombre apeló para llegar a la Cámara de Casación.
En esa instancia, no se presentó a una audiencia para sostener el recurso y, en consecuencia, el Máximo Tribunal penal lo dio por “desierto” y cerró definitivamente el expediente.