A Scataglini, los fiscales lo acusan de ser el eslabón político de una organización dedicada al juego clandestino. “La investigación avanza a paso muy firme, demuestra que hay núcleos de poder históricamente no tocados en esta provincia y están empezando a verse seriamente afectados”.
Scataglini fue imputado el sábado pasado, acusado de contribuir desde sus “influencias políticas” a una organización dedicada al juego clandestino. La jueza Eleonora Verón le impuso libertad con restricciones y le tomó como fianza la vivienda en la que vive, cotizada en 41 millones de pesos, de acuerdo con lo que informó La Capital de Rosario.
El delito atribuido por los fiscales de la Agencia de Criminalidad Organizada y Delitos Complejos es tráfico de influencias y negociaciones incompatibles con la función pública. Puntualmente, lo acusan de haber negociado para que la Lotería de la provincia de Santa Fe le otorgara a la empresa Wildar Gaming SRL, cuyo titular es el imputado Leonardo Peiti, la explotación de máquinas para apuestas online en salas habilitadas.
Scataglini, siendo asesor parlamentario de la Cámara de Diputados, habría influido para que se beneficiara a Peiti y al senador provincial Armando Traferri.