El director de la Agencia de Recaudación de la Provincia de Buenos Aires (ARBA), Cristian Girard, explicó que esta nueva suba les permite seguir fortaleciendo el tejido productivo bonaerense, al reducir la presión sobre pequeñas y medianas empresas y que, en este caso, el beneficio abarca a 700 pymes que evitarán tener que desempeñarse como agentes de recaudación, lo que significará una reducción de su carga administrativa.
“Desde que comenzamos nuestra gestión, hace poco más de dos años, ya subimos tres veces el límite de facturación para agentes. La primera vez fue en 2020, antes de la pandemia, cuando dimos un salto de 175%. En 2021 le sumamos otro 36%, y ahora agregamos más de un 66%”, precisó.
El funcionario provincial, además, indicó que con esos aumentos consecutivos del piso lograron que un total de 6.755 pymes dejen de funcionar como agentes de recaudación y, adicionalmente, que haya una reducción muy importante de las operaciones alcanzadas por retenciones de Ingresos Brutos, disminuyendo la acumulación de saldos a favor y favoreciendo el desahogo financiero del sector productivo.
De esta manera, la actualización de valores que anunció el titular de ARBA por Twitter prevé que los contribuyentes que hubieran obtenido durante el año calendario anterior ingresos brutos operativos (gravados, no gravados y exentos) superiores a $250 millones deberán actuar como agentes de recaudación del régimen general (antes ese parámetro se ubicaba en $150 millones).
Por su parte, las empresas que actúan ante la Provincia de Buenos Aires como agentes de recaudación de impuestos tienen la obligación de retener o percibir dinero de los contribuyentes como pago a cuenta del Impuesto sobre los Ingresos Brutos, para luego depositarlo a la orden del fisco -es decir, que asumen la función de recaudar en nombre de ARBA-.