Tras la decisión del Gobierno nacional de disminuir el subsidio a las empresas de transporte público de pasajeros prestatarias de Jurisdicción Nacional, desde la Unión Tranviarios Automotor (UTA) consideraron que a partir de esa medida se desregula completamente al sector y se lo deja “a la buena de Dios” dado que, por ejemplo, todavía hay jurisdicciones que ni utilizan la tarjeta SUBE (a través de ese medio se busca subsidiar al pasajero).
Por tal motivo, afirmaron que ante este nuevo cuadro de situación las compañías tendrán la facultad para subir el valor de sus tarifas sin ningún tipo de límite, lo cual generará discordia y conflictos entre el Estado Nacional y los Estados Provinciales. “Se carece de una hoja de ruta, sin ella, el sistema de transporte colapsará, inevitablemente e irremediablemente… Peligran el salario, las fuentes de trabajo y el sistema de transporte de pasajeros”, vaticinaron.
Finalmente, desde el gremio que conduce Roberto Fernández enfatizaron que como entidad sindical es su deber advertir lo que pasa y que están dispuestos a colaborar en una “hoja de ruta” o plan de transición en el que participen todos los protagonistas involucrados.