“Ahora el pacto solidario global es la meta que tenemos por delante. Tenemos que superar la infelicidad opulenta de sociedades que descartan a los más débiles e idolatran la ganancia desenfrenada y deshumanizada de un modo amoral”, remarcó el Presidente Alberto Fernández durante su participación por videoconferencia en el Foro Económico Mundial de Davos 2021.
Por otro lado, consideró que la pandemia demostró, una vez más, que para lidiar con los grandes desafíos globales deben cooperar entre actores públicos y privados y, por caso, mencionó a modo de ejemplo los programas que impulsó el Estado ante el coronavirus para dar respuesta al sector productivo y destacó la implementación del programa de Asistencia de Emergencia al Trabajo y la Producción (ATP) que asistió a 60% de los empleadores del país y dio créditos a Pymes; y del Ingreso Familiar de Emergencia (IFE).
Al mismo tiempo, señaló que la cooperación público-privada permitirá que la industria argentina intervenga, en un esquema de integración productiva con socios latinoamericanos, en la producción de la vacuna Oxford-AstraZeneca para toda la región, y recomendó que la vacuna sea considerada un Bien Público Global.
“Esta crisis es un momento único para repensar las modalidades de desarrollo y los esquemas de cooperación internacional. En este escenario es necesario vincular el multilateralismo con un concepto de multi-solidaridad, que involucre a Estados, empresas y también a trabajadores”, enfatizó Fernández, quien además aseguró que como Presidente Pro Tempore del Mercosur también se encuentra comprometido a impulsar junto a Brasil, Paraguay, Uruguay y los Estados asociados, una agenda que promueva una integración más profunda e innovadora con el resto de América Latina, Europa y Asia.
En otro tramo de su discurso, recordó que en plena pandemia tuvieron que lidiar con otro virus no menos destructivo, el cual fue el “endeudamiento tóxico e irresponsable”, pero que gracias al acuerdo político y social de todo el país alcanzaron una reestructuración de la deuda con acreedores privados con un nivel de aceptación de 99,5%.
“El diálogo con el FMI está en marcha y ha sido muy constructivo… Valoro las innumerables muestras de apoyo tanto desde la comunidad internacional como desde el G20 que ha recibido la Argentina en el proceso de renegociación de las condiciones del acuerdo con el FMI. El programa que se acuerde con el Fondo será enviado al Congreso para involucrar a toda la dirigencia política argentina en un camino de desarrollo que tenga la sustentabilidad de la deuda, la inclusión social y la transparencia como políticas de Estado”, especificó.
Por último, el Jefe de Estado anticipó que el Gobierno nacional convocará prontamente a un “Consejo Económico y Social para el Desarrollo”, que reunirá con sentido amplio y permanente a todos los actores del país a consolidar rumbos previsibles de mediano y largo plazo.