La Unidad de Investigaciones Complejas de la fiscalía porteña despejó en las últimas horas los puestos de venta ambulante sobre la calle Ramos Mejía, en el exterior de las estaciones de los ferrocarriles Mitre, Belgrano y San Martín de la Estación de Retiro.
Los fiscales Sandra Verónica Guagnino y Walter López encabezaron los procedimientos que tuvieron por objetivo “recuperar el normal uso del espacio público”, en el marco de una causa que lleva más de un mes de investigación y en la que “se persigue a una organización de venta ilegal en espacio público”.
Según el Código Contravencional, “quien organiza actividades lucrativas no autorizadas en el espacio público, en volúmenes y modalidades similares a las del comercio establecido, es sancionado/a con multa de 5.000 a 30.000 pesos”.
Según informaron fuentes de la fiscalía, se secuestraron más de 100 bolsas con mercaderías de venta ambulante, siete estructuras metálicas que servían para armar puestos, y se labraron unas 20 actas de infracción.
“Entre la mercadería, aunque aún falta procesar y clasificar, se secuestraron ropa, accesorios de celular, tarjetas de teléfono, DVDs y CDs. En solo dos puestos que vendían artículos de celulares los objetos incautados ascienden a la suma de 100 mil pesos”, revelaron las fuentes.
Guagnino, a cargo de la Unidad de Investigaciones Complejas, explicó que “la ocupación ilegal de los espacios públicos es la comprobación más fehaciente de la existencia de un Estado debilitado e incapaz de respetar y hacer respetar la ley, generando con ello espacios que facilitan la corrupción de los funcionarios públicos que al tolerar la comisión de hechos ilícitos en flagrancia destruyen el Estado de derecho”.