El titular de la CGT opositora anticipó que pedirán un 30% de aumento -como piso- para negociar los salarios ya que la inflación no detiene su crecimiento.
El líder de la CGT disidente, Hugo Moyano, quien recientemente mantuvo un encuentro con el dirigente gastronómico Luis Barrionuevo, cuestionó al Ejecutivo nacional por la falta de respuestas a sus reclamos y consideró que el piso de negociación para las próximas paritarias debería ubicarse en torno al treinta por ciento, dado que la inflación continúa en franco aumento. “Si la inflación sigue subiendo, el piso para los aumentos salariales en paritarias será del 30%”, indicó momentos previos a ingresar a una reunión del Consejo Directivo de la central en la Federación de Camioneros.
De hecho y pese a que durante ese encuentro se definirá la postura sobre aquellos temas que se abordarán en el plenario a realizarse el próximo lunes en la ciudad de Mar del Plata, se prevé que adoptarán una postura similar a la del titular de la CTA opositora, Pablo Micheli, quien había planteado aumentos del 35 por ciento para “empardar” con el porcentaje de inflación.
Además, otras de las versiones que circularon entre los referentes sindicales de la oposición pero que nadie ha oficializado hasta el momento, es la de pedir que la discusión por las negociaciones salariales se realice semestral o trimestralmente para que las subas se ajusten al aumento de los precios.