La Legislatura tucumana se fijó para el Presupuesto de 2015 970 millones de pesos para gastar, lo que arroja un promedio diario de 2,65 millones. Los datos, publicados por La Gaceta, están llamados a provocar polémica.
El 78 por ciento del presupuesto será para salarios de los empleados transitorios y permanentes, y el 22 por ciento restante tendrá por destino gastos corrientes (para funcionamiento del edificio, viáticos y eventos) y los muy cuestionados “gastos sociales” legislativos.
La Legislatura tiene unos 3 mil empleados (925 en planta permanente), por lo que si se dividen los 740 millones presupuestados para haberes en 13 (12 sueldos y el aguinaldo), y se divide por el número de empleados, cada uno recibiría por mes un total de 19.000 pesos en bruto.
Una de las cuestiones más polémica en la Legislatura de Tucumán son los gastos sociales.
Cada uno de los 49 legisladores cuenta con los siguientes recursos: la dieta (unos 23 mil pesos) y una partida para gastos sociales, cuyo monto tampoco se publica pero que, como mínimo, ronda los 65 mil pesos.
Muchos legisladores optan por contratar, con esta plata, más personal transitorio para su equipo. Incluso, a la Presidencia de Cámara están asignadas -con este tipo de contrato- cerca de 300 personas.