Los bloques de la oposición al delasotismo en Córdoba, la Unión Cívica Radical (UCR), el Frente Cívico (juecismo), el PRO y Encuentro Vecinal Córdoba, negocian por estas horas la formación de un interbloque en la Legislatura.
El origen de la búsqueda de este acuerdo es el exitoso pacto de no agresión entablado por los presidentes de los bloques de la UCR y del Frente Cívico, Rodrigo de Loredo y Liliana Montero, para la sesión en que los radicales se quedarían con la primera minoría de los juecistas, como consecuencia de que éstos perdieron un integrante y quedaron con uno menos que los otros.
La idea fue evitar que una ruptura pública complicara los avances hacia una alianza entre la UCR y el Frente Cívico para las elecciones provinciales y municipales 2015.
El siguiente paso es la conformación de un “interbloque”.
Los bloques que negocian su unión política son los de la UCR, Frente Cívico, PRO y Encuentro Vecinal Córdoba (los dos últimos, unipersonales, integrados por Javier Pretto y Aurelio García Elorrio).
La figura del interbloque está prevista en el Reglamento Interno de la Legislatura, pero precisamente el artículo 57 aclara que no influye en la distribución del poder en la Cámara: “Dos o más bloques políticos podrán constituir un interbloque, al solo efecto de actuar políticamente en forma conjunta”.
Y agrega: “La conformación de un interbloque no implicará asignación de estructura administrativa, ni incidirá en la representatividad legislativa de cada bloque en la integración de las comisiones de la Legislatura”.