El peronismo consiguió el apoyo de los bloques de la Unión Cívica Radical (con una sola excepción y del PRO), mientras que el juecismo, el otro aliado en Cambiemos, votó en contra junto con el kirchnerismo, la izquierda y el vecinalismo.
Carlos Gutiérrez, de Unión por Córdoba, explicó que “en este cambio en los gasoductos priorizamos lo principal: que los cordobeses tengan gas”. “La plata para los gasoductos troncales la tenemos y las obras se van a realizar en menor tiempo y a menor costo”, aseguró.
El radical Orlando Arduh señaló que “esta nueva licitación viene a corregir un despropósito del gobierno de Schiaretti, que resulta necesaria para una obra de importancia y sobre todo de urgencia para la calidad de vida de los cordobeses”. El mestrista dijo “entender claramente que están en juego otras cuestiones. Cuestiones vinculados a empresas sospechadas. Cuestiones vinculadas a una enorme desprolijidad en el manejo de la cosa pública a la que nos tiene acostumbrados este gobierno”.
En tanto, Liliana Montero (Córdoba Podemos), respondió las críticas del oficialismo manifestando con ironía que “algunos nos oponemos al progreso con corrupción. Algunos nos oponemos al progreso indiscriminado que algunos funcionarios públicos han tenido de la mano de la obra pública en esta provincia en los últimos diecisiete años. A ese progreso individual o de alguna estructura política es al que nos oponemos”.