“Es una medida cínica. El gobierno nacional deshumaniza sus políticas, no entiende que hay gente que tiene que optar entre comer o pagar la luz y el gas por una situación económica que están generando ellos”, aseguró Marín.
Marín planteó que “es ridículo” el recorte “porque la tarifa social necesita tener un criterio federal. Hay provincias, como las patagónicas, donde el invierno es más crudo y el consumo de energía es mayor. Por eso cargarles el financiamiento y luego decirse federales es un oxímoron”.
“Hay que ver qué va a pasar cuando lleguen las primeras facturas”, dijo. Asimismo, advirtió que “hay un estudio de la Universidad de Avellaneda donde el costo del servicio público sobre el salario mínimo es del 6 por ciento en Sudamérica mientras que en Argentina es el 19 por ciento”.
Con respecto al servicio eléctrico, el legislador provincial detalló que “en el caso de la electricidad se incrementó un 3.500 por ciento desde que asumió Macri. Mucha gente no puede más, no tienen un decimal de sensibilidad social”.
“Lo que el gobierno nacional ha hecho con las tarifas de servicios públicos ha sido ajustarlas al valor dólar sin considerar ningún tipo de previsión respecto a la posibilidad de un incremento cambiario desproporcionado respecto a los ingresos de los argentinos. Para peor, la única medida paliativa para los sectores económicos de menos recursos ha sido transferida a las provincias”, siguió.