El ministro de Desarrollo Social de la Nación, Daniel Arroyo, afirmó que se volcaron más de 121 mil millones de pesos en asistencia alimentaria para sostener la crisis provocada por la pandemia del coronavirus.
“Tuvimos un primer logro: cubrimos la asistencia alimentaria en un contexto en el que pasamos de 8 a 11 millones de argentinos. Fue un trabajo conjunto del Estado más la red social de la Argentina, que conforman las iglesias, las organizaciones sociales y las escuelas, y también el sector privado”, expresó el funcionario en el marco de la reunión -virtual- del Consejo Federal Argentina contra el hambre.
De la misma manera, contó que lograron una cobertura que comenzó en diciembre del año pasado en la ciudad de Concordia, Entre Ríos, con la Tarjeta Alimentar, que fue el primer programa que pusieron en marcha y era la base para iniciar otras políticas, pero que la pandemia los obligó a atender la situación alimentaria.
“Se aumentó la entrega de alimentos de manera directa, las transferencias a municipios, descentralización de fondos”, enumeró Arroyó, quien además destacó la puesta en marcha de las comisiones de Acceso a los alimentos, Calidad y educación nutricional, y Producción y comercialización de alimentos para la soberanía alimentaria, que están integradas por funcionarios de Desarrollo Social, representantes de sectores académicos, y referentes de organizaciones sociales, sindicales, eclesiales y empresariales de todo el territorio nacional.
A través del Ministerio de Desarrollo Social, el Gobierno nacional confirmó que destinó durante el primer año de gestión 121.602 millones de pesos para sostener y ampliar la Tarjeta Alimentar y los programas de módulos alimentarios, asistencia a comedores y merenderos y comedores escolares y Pro Huerta, entre otros.
“Sostuvimos la situación, pero tenemos problemas con el costo de los alimentos y la calidad nutricional, y tenemos que fortalecer las economías regionales”, completó el ministro.