“Los casos, razonablemente, deberían empezar a bajar como consecuencia de la primera medida que tomamos. Los efectos del confinamiento recién los vamos a poder ver en dos semanas. Sin embargo la situación no es simple; es necesario seguir sosteniendo la menor circulación posible”, sostuvo el Presidente Alberto Fernández en declaraciones a Radio Splendid tras ser consultada sus conclusiones sobre los nueve días de “confinamiento estricto” para las zonas del país que se encuentran en alerta epidemiológica por el COVID-19.
Por otro lado, cargó contra aquellos distritos que resolvieron retomar con las clases presenciales en el día de la fecha. “Están jugando con fuego y el fuego va a quemar a la gente”, advirtió, a la vez que mencionó que en Alemania, por ejemplo, hay una estimación que se realiza para medir el riesgo de la pandemia a la que se llama “tasa de incidencia”, la cual mide cuántas personas se contagian cada 100 mil habitantes.
“Cuando llega a 150, se suspenden las clases presenciales. En todos estos lugares que hoy retornaron con las clases, estamos hablando de tasas de incidencia de 600 a 700, cuatro veces lo que marca Alemania”, graficó el Jefe de Estado.
En ese sentido, sostuvo que las recomendaciones que realizan no son “un capricho” que se les ocurrió para “jorobar” la vida de la gente, sino que está comprobado que la educación moviliza cerca del 25% de la cantidad de personas que circulan. “El Gobierno de Buenos Aires también lo sabe. Por eso no permite el regreso de los alumnos más grandes”, añadió Fernández.
Por último y en relación a la vacunación contra el COVID-19, aseguró que a partir de junio comenzará la producción local de la Sputnik V, al tiempo que estimó a durante el próximo mes la Argentina podría fabricar más de dos millones de dosis. “Si las cosas salen como están previstas, deberíamos tener más de dos millones de dosis realizadas en el país”, completó.