Según se desprende de un análisis elaborado por el Ministerio de Salud bonaerense realizado a partir del Sistema de Gestión de Camas en hospitales públicos y privados de la Provincia de Buenos Aires, el 62% de las personas que se encontraban internadas con diagnóstico de COVID-19 al 10 de diciembre no estaban vacunadas, mientras que el 14% sólo se había aplicado una dosis.

Asimismo se indicó que sobre un total de 416 hospitalizaciones, 28 son niños, niñas y adolescentes menores de 18 años que no recibieron ningún tipo de inmunización, pese a que en el territorio provincial el esquema completo es libre y gratuito a partir de los 3 años de edad.

Por otra parte, en el informe realizado por el equipo de asesores de la cartera que conduce Nicolás Kreplak se observó que en las últimas seis semanas -desde el 1º de noviembre hasta el 12 de diciembre- se registra un aumento sostenido del promedio diario semanal de casos, que pasó de 458 entre el 1º y el 7 de noviembre a 948 en la semana del 6 al 12 de noviembre.

De la misma manera, en las últimas dos semanas relevadas se registró una suba del 24%, al pasar de un promedio diario semanal de 764 a 948 casos.

“Cabe señalar que el promedio diario semanal de casos (948) en la Provincia representa sólo el 8 por ciento de las más de 11.800 infecciones diarias a las que se llegó durante el pico que se registró en mayo de este mismo año, durante la segunda ola de coronavirus en el país”, agregaron.

No obstante y frente a este panorama en un mes que estará signado por las reuniones de fin de año al que se suma el registro, en otras jurisdicciones, de la nueva variante de preocupación Ómicron, el Ministerio de Salud bonaerense reforzó la convocatoria a todos los bonaerenses para que concurran a los vacunatorios, así como también para que completen sus esquemas de vacunación y reduzcan así el riesgo de contraer cuadros graves de COVID-19.

A su vez, se insistió en que la inmunización con esquema completo, que es libre y gratuita en toda la Provincia para toda la población vacunable, es clave para prevenir casos graves y el eventual desencadenamiento de una nueva ola pandémica.

Por otro lado y en relación a la letalidad por consecuencia de la enfermedad, se observó que la misma comienza a disminuir a medida que aumenta el porcentaje de población vacunada, dado que a comienzos de año era del 2,5%; mientras que a fines de octubre se llegó a valores menores del 1%, con un 60% de la población vacunada con dos dosis.