Solicitan la derogación del anticipo del impuesto a las Ganancias

En el pedido formulado por la Cámara Argentina de Comercio y Servicios a la Administración Federal de Ingresos Públicos se plantea que la medida afectaría a numerosas firmas, en especial a las PyMEs, “en un contexto económico financiero especialmente complicado”. Por Cuarto Intermedio

La Cámara Argentina de Comercio y Servicios (CAC) le envió una nota al titular de la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP), Carlos Castagneto, en la cual le manifestó su preocupación en relación a la Resolución General 5391 que establece que determinados contribuyentes incluidos en el art. 73 de la Ley del Impuesto a las Ganancias, tales como sociedades anónimas, sociedades de responsabilidad limitada, fideicomisos y otros sujetos de capital, deben ingresar un anticipo del Impuesto a las Ganancias del 15% a realizarse en tres cuotas mensuales y consecutivas.

En ese sentido, desde la entidad consideraron que el monto establecido afectará a numerosas firmas, incluyendo al segmento PyME, “en un contexto económico financiero especialmente complicado”. De esta manera -añadieron- se neutraliza cualquier “alivio fiscal” que se le otorgue al sector PyME de la Economía.

Por otro lado, remarcaron que la norma no contempla el cómputo de quebrantos de ejercicios anteriores ni permite la reducción o anulación del anticipo adicional ante la estimación de menores o nulos resultados en el ejercicio en curso, ni admite su cancelación por compensación con saldos a favor de libre disponibilidad que pueda tener el contribuyente.

Asimismo, indicaron que “se insiste en poner la totalidad del ajuste que requiere la economía nacional en cabeza del sector privado, en este caso vía un virtual empréstito gratuito para determinados contribuyentes que disminuirá su capacidad de producir, invertir y dar empleo”, y que “vale agregar que todo lo anterior se ve agravado por lo imprevisto de la modificación, que parece no tener en cuenta que las empresas presupuestan su actividad y su flujo de fondos, los que se ven drásticamente alterados por la obligación de ingresar el anticipo adicional”.

Desde CAC también afirmaron que “nos encontramos así con una nueva carga fiscal a los contribuyentes que son parte del universo formal, sin procurar generar la disminución de la informalidad, la baja del gasto público y la enorme presión fiscal sobre aquellos que pagan”.

Por último expresaron que el deseo de la Cámara es que, tras esta solicitud representativa del pensamiento de miles de empresas, se derogue la mencionada norma.