La medida de fuerza, de acuerdo a lo argumentado por la Asociación Trabajadores del Estado (ATE), se adoptó frente a las políticas impulsadas por el Gobierno nacional que “atentan” contra el sistema público en su totalidad, a través de fuertes recortes salariales, intentos de cierre de organismos y amenazas de despidos.
“Enfrentamos un Poder Ejecutivo violento en su discurso y absolutamente insensible en sus embestidas a los trabajadores y los jubilados. Sin piedad siguen recortando salarios y jubilaciones. Utilizan la inflación y el presupuesto vencido como herramientas para aplicar un ajuste fenomenal en el Estado”, manifestó el secretario General del gremio, Rodolfo Aguiar.
En ese sentido, el dirigente remarcó que no pueden permitir que el Gobierno “festeje” un superávit logrado a costa del empobrecimiento de los trabajadores y los jubilados, y que además el Estado no es una empresa ya que no está obligado a generar ganancias. “Y aún en la hipótesis que aceptáramos que hay que mejorar las cuentas públicas, nunca se lo debe hacer destrozando a la gente. Hay que volver a pensar en gravar con impuestos a los ultramillonarios, a esos que nos siguen chupando la sangre. Debemos pensar en la renta minera, petrolera, financiera, los casinos y las salas de juegos”, apuntó.
Finalmente, el titular de ATE convocó a resistir el cierre de organismos públicos e impedir que el Estado Nacional retire su presencia de las provincias. “Van a ser millones los ciudadanos que van a quedar en situación de abandono y que hasta ahora eran contenidos por las políticas públicas. Vamos a una nueva huelga el día 12. El lunes vamos a definir qué modalidad va a tener esa medida y no descartamos votar nuevas protestas para la misma semana”, agregó.