Pese a que el massismo se impuso en seis de las ocho secciones electorales en las elecciones del pasado domingo, no logró desplazar al oficialismo del control de ambas Cámaras legislativas provinciales.
Pese a haber tenido triunfos resonantes en seis de las ocho secciones electorales, el Frente Renovador de Sergio Massa no logró desplazar al Frente para la Victoria (FpV) del centro de la escena en la Legislatura bonaerense.
El oficialismo seguirá siendo, luego del recambio del próximo 10 de diciembre, primera minoría y quedará muy cerca de tener quórum propio tanto en la Cámara de Diputados como en el Senado.
El Frente Renovador logró 29 de las 69 bancas en disputa, aunque no le alcanzó para revertir el predominio del kirchnerismo en la Legislatura bonaerense, que pese a la mala performance, obtuvo 25 escaños.
El massismo sólo fue superado por el kirchnerismo en la Tercera y la Sexta sección. En tanto, el Frente Progresista se ubicó tercero en todas las secciones, y más atrás quedó relegado el denarvaísmo, que apenas ingresará dos diputados. El Frente de Izquierda, por su parte, logró un lugar en Diputados.
Tras el recuento oficial surge que el Frente para la Victoria obtuvo 18 bancas de diputados (cuatro por la Segunda sección; ocho por la Tercera, cuatro por la Sexta y dos por la Octava) y siete en el Senado (tres por la Primera, dos por la Cuarta y dos por la Quinta).
En tanto, el Frente Renovador se llevó 16 bancas de diputados (cuatro por la Segunda; siete por la Tercera; tres por la Sexta y dos por la Octava) y trece escaños en el Senado (cinco por la Primera; tres por la Cuarta; dos por la Quinta y tres por la Séptima).
Por su parte, el Frente Progresista hizo una aceptable elección, con algunas sorpresas como el resultado en La Plata, que le permitió ingresar dos legisladores. La fuerza cosechó nueve bancas en Diputados (tres por la Segunda; dos por la Tercera; dos por la Sexta y dos por la Octava) y tres senadores (dos por la Cuarta y uno por la Quinta).
El denarvaísmo logró ingresar dos diputados por la Sexta sección y el Frente de Izquierda y los Trabajadores uno por la Tercera sección.
El FpV, aún con la derrota, queda muy bien parado de cara a los próximos dos años en la Legislatura, logrando casi el control de ambas Cámaras: en efecto, el FpV tendría 23 senadores (sobre 46) y 43 diputados -a los que se debe sumar los 2 de Nuevo Encuentro-. Esta situación, se explica por el éxodo (masivo en el Senado) de legisladores kirchneristas hacia el massismo, lo que provocó que el Frente Renovador deba poner en juego dos tercios de sus bancas (26 de 36). Al contrario, el FpV solo arriesgaba 16 de las 57 bancas que posee.