La ley antitabaco es evitada en los quioscos porque se usan cajas de cigarrillos enmarcadas para promocionar los productos, debido a que no les permiten usar avisos que puedan verse desde el exterior de los locales.
El primer artículo del proyecto de Passerini define como publicidad o promoción “toda forma de comunicación, recomendación o acción comercial, con el fin, el efecto, o el posible efecto de promover directa o indirectamente un producto de tabaco o el consumo de tabaco”. En tanto, describe que la exhibición de tabaco consiste en “toda forma de exposición de productos elaborados con tabaco que permita su visibilidad”.
El segundo prohíbe “en todo el territorio de la provincia de Córdoba la publicidad y promoción directa o indirecta de los productos elaborados con tabaco destinados al consumo humano, cualquiera sea su medio de difusión”.
El tercero artículo, prohíbe “la publicidad, promoción y exhibición de productos elaborados con tabaco, sus derivados y accesorios para fumar en dispensadores y cualquier otra clase de estantería ubicada en los locales donde se venden los productos de tabaco”.
La iniciativa fue impulsada por la Fundación para el Desarrollo de Políticas Sustantentables (Fundeps).