Las obras que contarán con una inversión de 1.100 millones de pesos servirán para solucionar un problema sanitario y ambiental, dado que en la actualidad el sistema de desagües cloacales de la capital correntina está compuesto por una serie de estaciones de bombeo que descargan los fluidos, sin ningún tipo de tratamiento, sobre el río Paraná.
“Estamos cumpliendo con el compromiso del Gobierno nacional y del Plan Belgrano para mejorar la calidad de vida de todos los correntinos. Esta nueva planta traerá mejor calidad de vida y menor contaminación”, aseguró el subsecretario de Recursos Hídricos de la Nación, Pablo Bereciartua, quien subrayó que con esta licitación quieren mostrar y revertir una cultura que estuvo marcada por la falta de transparencia y por promesas incumplidas en esa provincia.
Con la construcción de la planta depuradora, según precisaron, el líquido cloacal será tratado y volcado al río pero sin afectar sus condiciones naturales, evitando además la generación de enfermedades y olores.