Los gobiernos nacional, porteño y bonaerense pusieron en marcha nuevas medidas de control en los distintos medios de transporte de pasajeros, con especial rigurosidad en la circulación interjurisdiccional, para verificar que sólo se trasladen aquellos que realizan tareas esenciales.
Debemos dispersar los tradicionales horarios pico en la movilidad de nuestra sociedad e incrementar parque vehicular y frecuencias del transporte público a lo largo del día. Hay que “escalonar” temporalmente el inicio y finalización de las distintas actividades, a efectos de distribuir y desconcentrar horariamente personal y clientela.
Desde el Gobierno porteño indicaron que se trata de la cifra que se registra en la Ciudad de Buenos Aires desde que comenzó el aislamiento social, preventivo y obligatorio dispuesto por la administración nacional a raíz de la pandemia del coronavirus.
El objetivo es el de indagar acerca de la proporción de personas con serología positiva para el nuevo COVID-19, entre las que utilizan transporte público en distintos momentos, según las fases del aislamiento social preventivo y obligatorio. Será anónimo y evaluará a mayores de 18 años sin síntomas en los últimos 21 días.
La secretaria de Acceso a la Salud confirmó la puesta en marcha de los testeos a asintomáticos. El primer paso de la investigación será en la estación Plaza Constitución con el objetivo de evaluar el protocolo de toma de muestras. Luego, se hará extensivo a otras zonas de trasbordo del transporte público.
El Gobierno porteño dispuso que a partir del jueves 23 de abril próximo se implementen una serie de modificaciones en el esquema de los 111 accesos a la Ciudad de Buenos Aires, los cuales se trabajaron en conjunto con el Gobierno nacional, con el fin de agilizar el tránsito vehicular.
Desde la Subsecretaría de Transporte de la Provincia de Buenos Aires impulsaron nuevos protocolos y recomendaciones para los distintos tipos de servicios en el territorio bonaerense con el objetivo de que se sumen a las acciones que se vienen adoptando para la prevención de contagios por coronavirus.
Con el objetivo de prevenir posibles contagios de coronavirus, el Gobierno nacional estableció que a partir de ahora los pasajeros de todo el país que permanezcan o circulen en los servicios de transporte deberán utilizar elementos de protección que cubran nariz, boca y mentón.
A partir del día de la fecha, el uso de tapabocas en el ámbito porteño es obligatorio para todos los que utilicen el transporte público, así como también para quienes se encuentren en posición de atención al público en las actividades que se encuentran exceptuadas. Habrá sanciones de hasta 80 mil pesos para quienes no cumplan con la medida.
Con el fin de mantener el distanciamiento social en las situaciones de espera, operación y uso del transporte público, el Gobierno de la Ciudad informó que ya se intervinieron 500 espacios con indicaciones y gráficas alegóricas para que se respete el espacio entre las personas.