Al contrario de lo hecho por otros dirigentes como el propio presidente de la Cámara de Diputados Sergio Massa, quien a los pocos días de su regreso de los Estados Unidos participó en un acto junto al gobernador Kicillof en el conurbano bonaerense, la ministra de Salud, Carla Vizzotti; y la asesora presidencial, Cecilia Nicolini, comenzaron a cumplir tras su regreso del Reino Unido con el aislamiento de siete días dispuesto en el marco de la pandemia por el COVID-19 para las personas que ingresan al país desde el exterior.
De esta manera y si bien en un principio estaba previsto que las funcionarias ofrecerían una conferencia de prensa para informar sobre los alcances de los encuentros que mantuvieron en Londres con las autoridades sanitarias locales, finalmente se informó oficialmente que no harán uso de la excepción que les corresponde por ejercer la función pública en el marco de la disposición 3911/2020 y el Decreto N° 274 del 16 de marzo de 2020.
Según esa norma -cabe recordar- están exceptuados de cumplir la cuarentena transportistas y tripulantes que se encuentren en el ejercicio exclusivo de su actividad, así como también funcionarios y diplomáticos, previamente autorizados por la Dirección Nacional de Migraciones; deportistas que estén dentro del marco de los protocolos autorizados para eventos deportivos; y trabajadores esenciales con la correspondiente autorización.
En el marco de la norma, los funcionarios públicos que regresan al país tras una misión de gobierno deben cumplir con los controles establecidos y, conforme a la excepción, solo tienen permitido cumplir con sus actividades laborales y en burbuja -algo que claramente no hizo en su momento el titular de la Cámara Baja nacional-.